Si la estética suele ser un factor determinante a la hora de comprar un coche nuevo, en esta categoría tan competida es aún más. El Audi A1 tiene que verse las caras con coches que han puesto el listón muy alto en cuanto a imagen, como los Alfa Mito o Mini. La clave, además del diseño, está en las posibilidades de personalización.
La versión 1.4 TFSI de 125hp que probamos ofrece potencia y prestaciones más que de sobra, que en conjunto con la caja S-tronic de 7 marchas en verdad que hacen muy buen trabajo de sincronía.
El S tronic como dato cultural, combina las características deportivas de la caja de cambios manual con las ventajas de la automática. El cambio de marchas se realiza con facilidad y sin demora aparente gracias a la caja de cambios de doble embrague.
Dentro de la unidad que aplica Audi a todos sus diseños, sobre todo en el frontal, con la característica parrilla de la marca, el A1 es el que más se sale de los patrones establecidos. Estamos ante un coche de capricho, nacido para hacer frente nada menos que al Mini.
Esta es una de las claves del nuevo Audi A1, la posibilidades de combinar colores y elementos de carrocería para configurar el coche prácticamente a medida y no faltan los característicos packs de carrocería que suele ofrecer Audi en todos sus modelos, como el exitoso S-Line.
Por tacto de los mandos, calidad de acabado, ajuste, terminación o materiales empleados, el interior del Audi A1 es perfectamente equiparable al de un A3. No hay duda, es todo un Audi, y ninguno de sus rivales está a su altura en refinamiento. Eso sí, en 3.95 metros no se pueden hacer milagros: las plazas traseras no están hechas para resguardar cómodamente a 2 adultos, y el área de carga es muy pequeño.
Su diseño exterior no resulta exageradamente llamativo. Al menos no para lo que esperas de un coche que compite directamente con el Mini. La sobriedad que caracteriza a Audi sólo se ve alterada por el toque de color que pueden dar equipamientos como la línea interior con recubrimientos para las salidas de aire, molduras y alfombrillas. No hay, por tanto, diseños atrevidos ni experimentos con los relojes de la instrumentación, o con los distintos mandos. Son los mismos que podrías encontrar en cualquier Audi.
El Audi A1 2016 cuenta con cuatro plazas siendo las dos traseras muy pequeñas como ya anteriormente comentamos y que vienen siendo perfectas para transportar niños, especialmente por la altura disponible o para utilizarlas como extensión de la cajuela abatiendo los respaldos.
El conductor y su acompañante sí están muy bien consentidos. Aquí no hay agobio en cuanto a espacio. Incluso la visibilidad hacia atrás es correcta con la pequeña luneta y las ventanillas posteriores. El puesto de conducción es magnífico, sobre todo en esta versión que cuenta con un amplio apoyo para reposar el pie izquierdo y con asientos deportivos que sujetan el cuerpo de maravilla, sin resultar incómodos en viajes largos.
El interior del Audi A1 no es lo mismo sin la pantalla central de 6,5 pulgadas que funciona de maravilla, con gráficos y mapas de excelente calidad, la pantalla está ubicada en la parte alta del tablero, por lo que no hay que desviar mucho la vista para consultarla. Además, podemos recibir informaciones del sistema de navegación en el pequeño display en el cluster de instrumentos.
No llega a la pasmosa agilidad de reacciones que ofrece un Mini; a cambio, el Audi A1 es algo más fácil de llevar rápido para un conductor medio. Claro que el resultado final dependerá mucho de la combinación elegida entre suspensión y neumáticos.
Suficientemente potente y muy rápido. Primero por el 1.4 TFSI de 125hp; lo segundo, Por la transmisión S-tronic de doble embrague con 7 marchas. Si los juntamos, la combinación es perfecta. Ya la habíamos probado en otros coches, entre ellos, el Volkswagen Golf.
El 1.4 TFSI no es un motor que guste de girar a altas revoluciones; su entrega de potencia, siempre es presidida por una suavidad exquisita cuidando siempre las distancias, siendo muy similar a la de un motor diesel: denota mucho par desde muy abajo, pues empuja con solvencia desde poco más de los 1000 rpm, y ofrece el par máximo ya a las 1.500 vueltas. Ofrece más margen de utilización que un TDI, pero tampoco insistas hasta el corte, no vale la pena cambiar más allá de las 5.500 rpm.
El A1 1.4 TFSI también permite practicar una conducción económica entre su eficiencia, el sistema de recuperación de energía y el start-stop de serie (por cierto, de buen funcionamiento, poniendo en marcha el motor en cuanto levantas el pie del freno, aunque en algunas circunstancias puede ser algo lento, pero puede desconectarse), no hay que esforzarse mucho para conseguir consumos por debajo de los 7 l/100 km.
Eso sí, cuando le pisas, este 1.4 TFSI parece llegar a tener un motor de más cilindrada y potencia, tanto por lo que corre como por lo que puede llegar a gastar: por encima de los 14 l/100 km, cuando le exiges en carretera entrega 9.2 l/100 km pero sin pasar nunca de 150 km/h.
Si te compras un Audi A1, mucho ojo con la lista de opciones. El equipamiento de serie no es precisamente completo y si te pones a sumar por aquí y por allá, entre los elementos aconsejables y un par de opciones de personalización, la factura llegar a a los números del siguiente escalón, el A3.
En resumen, podríamos decir que el auto es excelente como auto de ciudad por su tamaño, diseño, prestaciones y autonomía, si bien, es el modelo de entrada a la marca, YA ES UN AUDI no solo por los logos y emblemas, sino por la tecnología, calidad de materiales y prestaciones.
Precio y versión del modelo a prueba:
Audi A1 1.4 TFSI 125 hp Cool 2016
S tronic 7vel.
Traccion delantera
Sistema Start-Stop,
Audi Drive Select®
Luces de Xenón plus
Sistema de sonido Bose.
$324,900.00 MXN
